Hablar de nuestra historia, es pensar en nuestra identidad, marcada por la conquista y luego por la campaña libertadora. Con líderes que guiaron mestizos, gauchos e indios batiéndose en batallas para defender la patria. Luchar para emanciparnos de la corona, fijar los límites y proteger nuestra tierra. Esa forma que finalmente tuvo nuestro país, es la que ahora reconocemos en el mapa físico-político que pende de la pared frente a nuestro escritorio. Con un puño mesopotámico que se hunde en Brasil y que debemos agradecer, a esos hombres que se animaron a explorar, a enfrentar peligros desconocidos, para izar finalmente la bandera y hacer patria en lugares salvajes.
Hablar de nuestra patria, es reconocer en nuestros próceres, el espíritu de emancipación y de lucha, que engrandecieron nuestro espíritu.
Hoy, ya pasados más de dos siglos , es imprescindible conocer nuestra historia lejana. Es parte de nuestra responsabilidad cívica y social. Es una nueva oportunidad, ver que nuestro país, aquel país, necesita mucho de nosotros. Y esto me trae al recuerdo un viejo cuento con cuatro personajes : Todos, Alguien, Cualquiera y Nadie.
Ocurrió que había que hacer un trabajo importante y Todos sabían que Alguien lo haría. Cualquiera podría haberlo hecho pero Nadie lo hizo. Alguien se enojó porque le hubiera correspondido a Todos. El resultado fue que Todos creían que lo haría Cualquiera y Nadie se dio cuenta que Alguien no lo haría. ¿Cómo terminó la historia ? Alguien reprochó a Todos porque en realidad Nadie hizo lo que hubiera podido hacer Cualquiera.
Hoy, como argentinos, nos pasa algo muy similar. Estamos pasivamente esperando que Alguien nos proponga lo que podemos hacer y aún más, que Alguien lo haga por nosotros.
Argentinos, pensemos y luchemos por nuestro destino y por el de nuestros hijos ! Nuestra patria así lo espera ! Feliz 25 de Mayo !
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